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Guinea Ecuatorial presentó esta semana un proyecto de resolución a sus colegas miembros del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el refuerzo de los esfuerzos para combatir a los mercenarios que luchan en África central.
El borrador, no nombra a ningún país específico, sino que pide a todos los estados miembros que eliminen la práctica de contratar combatientes extranjeros.
Les pide que «introduzcan medidas legislativas para garantizar que sus nacionales no participen en el reclutamiento, la recolección, la financiación, la capacitación, la protección o el tránsito de mercenarios o combatientes extranjeros».
También les pide que se abstengan de «planificar actividades para desestabilizar la situación en un estado o socavar o comprometer total o parcialmente la integridad territorial o la unidad política de los estados soberanos e independientes».
Varias misiones de la ONU se sorprendieron con la presentación del borrador, ya que el mandato de dos años de Guinea Ecuatorial en el Consejo de Seguridad como miembro no permanente finaliza el 31 de diciembre.
El borrador se centra en África central, una región que incluye la República Democrática del Congo, la República Centroafricana, la República del Congo, Chad y otros países.
Los mercenarios rusos han estado activos en el área en el pasado, y Moscú ha sido acusada recientemente de involucrarse en el despliegue de combatientes armados en Libia y Malí.
Rusia niega las afirmaciones.
El proyecto de resolución dice que las Naciones Unidas están «alarmadas por el peligro que representan las actividades mercenarias para la paz y la seguridad internacional … especialmente para los estados de África central».
«Insta a todos los estados de África central a tomar las medidas necesarias, cooperar entre sí y ejercer la máxima vigilancia contra la amenaza que representan los mercenarios».
