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El fabricante de equipos de bombeo Amarinth logró la entrega a tiempo de cuatro bombas de alta capacidad a eProcess Technologies destinadas al Complejo Okume, Guinea Ecuatorial operado por Trident Energy, contra los muchos desafíos planteados por COVID-19
El complejo Okume de 72 pozos se encuentra en el Golfo de Guinea, con profundidades de agua que varían de 45 m a 500 m. Como parte de un programa de actualización, se suministraron cuatro bombas horizontales de alta capacidad a eProcess Technologies. Dos bombas API 610 OH2 son para el tratamiento de agua producida, y dos son bombas de inyección centrales para la transferencia de procesos.
Las enormes bombas están hechas de acero inoxidable dúplex con certificación de material 3.1 y comprenden entre cinco y diez impulsores cada una. Son compatibles con la Zona 2 Zona Peligrosa, y requirió un amplio NDT / NDE.
Una vez que se ensamblaron las bombas, con ingenieros que se adhirieron estrictamente a las pautas de distanciamiento social y las prácticas de trabajo del gobierno, las pruebas hidráulicas presenciales en vivo se realizaron de forma remota utilizando una serie de cámaras web HD y una plataforma de software de datos integrada de Amarinth.
Esto permitió al personal de eProcess Technologies, inspectores externos y Trident Energy acceder a datos «en tiempo real» y ver los resultados de las pruebas en vivo a medida que se producían. Finalmente, Amarinth pudo aprovechar su agilidad en ingeniería y fabricación para adaptarse a una entrega dividida ya que las bombas se requerían en varios momentos.
Oliver Brigginshaw, director general de Amarinth, comentó: «Al ver la escala y el impacto potencial de la pandemia COVID-19, rápidamente aprovechamos nuestra ingeniería y agilidad comercial y la inversión en tecnologías de trabajo a distancia para realizar los cambios necesarios en nuestro modelo de negocio asegurando que pudiéramos trabajar con nuestros clientes y proveedores para mantener un tiempo crítico en la entrega de pedidos de bombas.
«Nuestro personal ha adoptado los cambios y nuestros clientes han demostrado una gran flexibilidad y comprensión al trabajar con nuestros procesos revisados, asegurando que todo se haya funcionado sin problemas. En todo momento, hemos seguido las directrices gubernamentales y las mejores prácticas de la Organización Mundial de la Salud para proteger a nuestro personal, clientes y proveedores por igual. Con las medidas implementadas, no sólo hemos sido capaces de seguir diseñando y fabricando bombas y entregándolas a tiempo a nuestros clientes, sino que también hemos visto un crecimiento anual de nuevos pedidos».
