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- Seis días han hecho falta para que el buque de la naviera Ever Given consiga desatascarse de las aguas del canal de Suez, una de las vías comerciales marítimas más transitadas del mundo.
- Las fuerzas de 10 remolcadores se han unido para mover el portacontenedores Ever Given, que impedía el paso de 367 embarcaciones en la zona desde el pasado martes.
La Autoridad del Canal de Suez (SCA en inglés) ha anunciado hace unas horas, este lunes 29 de febrero, que han logrado mover el Ever Given uno de los buques más grandes del mundo en la zona marítima que une el mar Rojo con el Mediterráneo, creada artificialmente el 1869 para el paso de barcos mercantes.
La autoridad gestora a través de un comunicado anunciaba la maniobra decisiva para reflotar el Ever Given. La operación ha comenzado a las tres de la madrugada de este lunes, siendo el factor clave la subida del nivel del mar y, la llegada de los remolcadores provenientes de los paises extranjeros, en especial el APL Guard de la región de Holanda. La estrategia aplicada consistía en dos remolcadores de 70 toneladas que tiraban de la proa del buque hacia al norte y otros dos, uno de ellos con un peso de 285 toneladas de fuerza tiraban de la proa hacia el sur; mientras cuatro empujaban desde los laterales de la nave, detallaba el comunicado.
El éxito de esta maniobra se vio paralizada horas después a la espera de una nueva subida del nivel marítimo que empezaría a las 11: 30, hora local de Egipto. En esta pausa el presidente de esta nación del cuerno de África, Abdelfatá Al Sisi, ha emitido un comunicado a través de su cuenta de Facebook en el que ha mostrado su optimismo para el desbloqueo del canal: “Hoy, los egipcios lograron poner fin a la crisis, a pesar de la enorme complejidad técnica que rodeó el proceso”.
Tras la operación exitosa esta madrugada, el jefe de la Autoridad del Canal de Suez, Osama Rabie, anunció «el comienzo del reflote con éxito del barco Ever Given después de que respondiera a las maniobras de arrastre y remolque», logrando modificar la orientación del buque en un 80% y alejarlo de la orilla del canal 102 metros, frente a los cuatro en los que se situaba antes la popa.
«Me complace anunciar que nuestro equipo de expertos, en estrecha colaboración con la Autoridad del Canal de Suez, ha reflotado con éxito el Ever Given el 29 de marzo a las 15.05 hora local, haciendo posible nuevamente el libre paso por el Canal de Suez», ha indicado Peter Berdowski, director ejecutivo de Boskalis, la compañía encargada del rescate del buque.
Este portacontenedores de 400 metros de eslora y 224.000 toneladas de capacidad de carga, de bandera panameña y propiedad de la firma taiwanesa Evergreen, quedó encallado y atravesado el pasado martes en el tramo sur debido, según la Autoridad del canal, a los fuertes vientos y a una tormenta de arena.
El bloqueo del canal de Suez representaba una amenaza a las cadenas de suministro del comercio global. A lo largo de los 190 kilómetros de esta vía navegable, que conecta el mar Rojo con el mar mediterráneo, y viceversa, fluye el 10% del comercio marítimo del planeta. Y es una de las más imprescindibles en el transporte de gas, petróleo y mercancías en contenedores, ocupando el último el 25% en el canal. El tráfico marítimo diario a través del canal de Suez tiene un valor que oscila a los 8.150 millones de euros (unos 533.825 mil millones de francos CFA), según la estimación de la empresa especializada en información sobre comercio marítimo Lloyd´s List. La infraestructura representa al mismo tiempo la principal fuente de ingresos en divisas extranjeras para el país de los faraones.
En el momento de empezar a reflotar el Ever Given, al menos 367 buques se encontraban esperando para poder cruzar el canal, que llevaba con la navegación oficialmente suspendida desde el pasado jueves. De ellos, 98 son graneleros, 96 contenedores y 35 transportan petróleo. Rabie había asegurado el sábado que, una vez completada la operación de rescate, las autoridades del canal trabajarían sin descanso para despejar las colas de barcos en un plazo de uno o dos días, aunque no está claro cuánto se podrá alargar este proceso teniendo en cuenta los barcos que han ido llegando desde entonces.
